El mundo
AFP
Viernes 19 de noviembre de 2021 • 11:43 am
Nicaragua solicitó este viernes salir de la Organización de Estados Americanos (OEA), que desconocía la legitimidad de las elecciones del 7 de noviembre, donde el presidente Daniel Ortega fue electo por cuarto mandato consecutivo.
«Le escribo para notificarle oficialmente nuestra decisión inquebrantable de denunciar la Carta de la OEA, de conformidad con el artículo 143 que da inicio al retiro y renuncia definitiva de Nicaragua a esta organización», dice la carta dirigida al Secretario General de la OEA, Luis Almagro, y firmada por el canciller de Nicaragua, Denis Moncada.
En la carta, dirigida al secretario general de la OEA, Luis Almagro, el canciller dice que está actuando por instrucciones del presidente Ortega. El proceso de salida tiene una duración de dos años, tiempo durante el cual Nicaragua debe cumplir con sus obligaciones pendientes con la agencia.
Ortega, un exguerrillero de 76 años en el poder desde 2007, ganó su cuarto mandato consecutivo, con siete de sus posibles rivales de oposición encarcelados por cargos de conspiración y otros delitos preelectorales, en medio de fuertes críticas internacionales.
A Estados Unidos se le prohíbe ingresar a él, su esposa y vicepresidenta Rosario Murillo y sus ministros.
El gobierno de Ortega tomó la decisión luego de que la Asamblea General de la OEA del 12 de noviembre ignorara la legitimidad de las elecciones nicaragüenses, con el apoyo de 25 de sus 34 miembros.
Las elecciones «no fueron libres, justas, transparentes y no tienen legitimidad democrática», declaró la OEA, que advirtió que tomará medidas basadas en la Carta Democrática, que incluyen la posible suspensión de Nicaragua del organismo.
El gobierno dijo que actuó sobre la base de una convocatoria realizada por el Congreso el lunes y luego fue respaldado por los otros poderes del estado, todos bajo el control del gobernante Frente Sandinista de Liberación Nacional (FSLN, izquierda).
El consenso gobernante es retirarse de la OEA por considerarla «injerencia» y que «obedece» a los intereses de Estados Unidos.
Managua mantiene tensas relaciones con Washington a raíz de las condenas y sanciones contra más de 30 funcionarios nicaragüenses, por corrupción y violación de derechos humanos durante la represión de las protestas contra el gobierno de Ortega en 2018.
Según un informe reciente de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), las manifestaciones dejaron 355 muertos, 1.614 detenidos, de los cuales más de 150 permanecen en prisión y más de 103.000 exiliados.