Los familiares de los alumnos con enfermedades crónicas que asisten al Centro Escolar Reinaldo Borja Porras, ubicado dentro del Hospital Nacional de Niños “Benjamín Bloom”, protestaron ayer contra el cierre de las aulas fijas y solicitaron la intervención de la Procuraduría para la Defensa de los Derechos Humanos ( PDDH) para que el Ministerio de Educación (MINED) no ejecute la medida.
Según los familiares de los estudiantes, desde diciembre de 2022 el MINED les informó sus intenciones de trasladar a los estudiantes de las aulas fijas a otras escuelas. Esta es una de las modalidades de la escuela, a través de la cual atiende a pacientes crónicos de Bloom que no están hospitalizados. El lunes por la noche, el ministerio confirmó su decisión en un comunicado y también la reiteró al día siguiente en una reunión con madres y padres, en la que, según los afectados, intentaron «convencerlos» para trasladar a sus hijos a otros colegios.
Ante lo que consideran una medida impuesta, los familiares de los estudiantes se congregaron ayer afuera del hospital para protestar y acusaron al MINED de violar los derechos de los niños al imponer traslados a otras escuelas sin brindar soluciones que no comprometan la salud de los niños. los niños.
“Se está vulnerando el derecho a la educación de los niños, tratando de trasladar el impuesto a los centros educativos que no están preparados para recibir a estos niños, que son pacientes del Hospital Bloom, y por eso están en esta escuela”, dijo Gloria Müller, una Docente en el turno de la tarde.
Wilbur Chávez, padre de uno de los estudiantes afectados, afirmó que el MINED no ha escuchado sus pedidos. “El gobierno debe dar una salida a este problema de cerrar las aulas, el ministerio solo quiere imponernos el traslado de nuestros niños a otras escuelas, el 20 de mayo ya nos pueden sacar”, dijo.
Salvador Cuéllar, otro padre de familia, explicó que los estudiantes necesitan ir a la escuela Bloom por la atención especializada que reciben. “Recordemos que la condición con la que se creó esta escuela es para atender a niños con algún tipo de enfermedad”, dijo.
La protesta fue apoyada por el Frente Sindical Salvadoreño. Idalia Zúñiga, representante de ese gremio, pidió al MINED escuchar a las familias, a quienes les han informado que para el 20 de mayo sus hijos deberían estar recibiendo clases en otras escuelas.
Los afectados también acudieron a la Procuraduría para la Defensa de los Derechos Humanos (PDDH) para solicitar su intervención y evitar el cierre de las aulas estacionarias. Un padre de familia que pidió anonimato dijo que un representante de la PDDH se comprometió a organizar una mesa de diálogo con el MINED. Además, la institución solicitará informes sobre las enfermedades que padecen los niños que asisten a dicho centro educativo.
El Hospital Escuela Bloom funciona desde el año 2000 y actualmente atiende a alumnos con epilepsia, trastornos del desarrollo intelectual, problemas cardíacos y anorexia. En total se encuentran matriculados 71 alumnos, quienes son atendidos por nueve docentes y tres de ellos se encuentran destacados en las aulas fijas.
Hasta ahora, las autoridades del hospital se han mantenido al margen de la situación, dijeron las familias.