10 de septiembre de 1997. El Comandante en Jefe del Ejército de Chile, Augusto Pinochet, es recibido por el obispo chileno Gonzalo Duarte, durante la conmemoración del 24 aniversario del golpe militar que impuso a Pinochet en el poder desde 1990. / Cris BOURONCLE
El mundo
Europa Press
Domingo 31 de octubre de 2021 • 10:00 a. M.
Cientos de niños chilenos fueron secuestrados y entregados ilegalmente en adopción en Suecia durante la dictadura de Augusto Pinochet en Chile, según un estudio publicado en Suecia por el diario ‘Dagens Nyheter’.
Las cifras ascienden a 2.100 adopciones entre 1971 y 1992, de las cuales 1.700 corresponden al camino abierto por Pinochet con la extrema derecha sueca.
El epicentro de los secuestros y partos sería la Sociedad Suecia-Chile, una asociación liderada por el ultraderechista Ulf Hamacher que hizo posible que el Centro de Adopciones de la Sociedad Sueca para el Bienestar Internacional del Niño Chileno entregara información positiva sobre el régimen chileno a los niños. núcleos familiares solicitantes de adopción.
La investigación se basa en los hallazgos de la doctora en Historia de la Universidad Austral de Chile Karen Alfaro y del profesor de historia y doctorando de la Universidad Autónoma de Barcelona, José Luis Morales, quien analizó la documentación diplomática de la Embajada de Chile en Suecia. y archivos del Fondo Sueco del Archivo Histórico General del Ministerio de Relaciones Exteriores de Chile y del Fondo del Ministerio de Justicia del Archivo de la Administración Nacional, entre otras fuentes.
Según la investigación, las altas esferas de la dictadura chilena acordaron secuestrar y enviar al país escandinavo a miles de niños que fueron entregados en adopción con el objetivo de romper el aislamiento diplomático del régimen.
«La Junta Militar de Chile utilizó la adopción internacional a Suecia en una campaña de influencia política», destaca el trabajo de investigación.
La Sociedad Suecia-Chile buscó mejorar la imagen de la dictadura chilena en Suecia a través de gestos humanitarios como buscar un futuro mejor para los niños que supuestamente habían sido abandonados cuando en realidad habían sido secuestrados.
Las primeras denuncias de adopciones ilegales llegaron en 2004 debido al trabajo de la periodista Ana María Olivares. Desde 2018 hay una investigación en Chile, liderada por el juez Mario Carroza, que se centra en la adopción irregular de niños chilenos durante la dictadura de Pinochet.
El Gobierno sueco ha reaccionado a través de su ministra de Asuntos Sociales, la socialdemócrata Lena Hallengren, quien ha anunciado una investigación para documentar posibles «irregularidades» en las adopciones internacionales de Chile.