En El Salvador viven 3.5 millones de mujeres, cerca de 700 mil hogares están encabezados por una mujer y alrededor de un millón de mujeres viven en el AMSS. ONU Mujeres afirma que existen marcadas diferencias por sexo: (1) la tasa de participación económica alcanza el 46% para las mujeres y el 79% para los hombres, (2) solo 4 de cada 10 mujeres jóvenes estaban disponibles para incorporarse a un empleo forzoso, en contraste con 7 de cada 10 hombres jóvenes, (3) 47 de cada 100 trabajadoras urbanas eran informales antes de la pandemia (frente al 38,6% de los hombres). Además, los salarios de las mujeres salvadoreñas equivalen aproximadamente al 86% de los que perciben los hombres.
El observatorio El Salvador Cómo Vamos (ESCV) acaba de publicar la “Situación de la mujer en el Área Metropolitana de San Salvador”, que mide la calidad de vida en los municipios del AMSS y destaca las desigualdades entre hombres y mujeres en el ámbito educativo, laboral y seguridad.
En educación, 26 de cada 100 niñas entre 4 y 6 años están fuera del sistema educativo en el AMSS. La mayor asistencia se logra en niñas de 10 a 12 años, donde el 98% se encuentra estudiando. Por otro lado, por cada 100 mujeres en la AMSS todavía hay 6 que no saben leer ni escribir. La escolaridad promedio de las mujeres en el AMSS es de 9 años (superior al promedio nacional: 7.1 grados).
De media, las mujeres dedican 4,2 horas diarias al trabajo doméstico no remunerado (un 68% más que los hombres). De cada 10 mujeres en edad de trabajar, 6 participan en el mercado laboral; en cambio, 8 de cada 10 hombres participan en el mercado laboral. De las mujeres económicamente activas, el 12% estaba desempleado (frente al 7% de los hombres). Entre los que estaban empleados, el 38% eran trabajadores independientes, el 14% eran trabajadores asalariados formales y el 33% trabajadores asalariados no formales. Además, 3 de cada 10 mujeres ganan menos del salario mínimo y 2 de cada 10 hombres ganan menos del salario mínimo.
Las mujeres se sienten menos seguras que los hombres. Los municipios de Antiguo Cuscatlán y Santa Tecla se destacan como los municipios del AMSS en los que las mujeres se sienten más seguras; San Martín y Apopa, donde se sienten menos seguros. Solo 34 de cada 100 mujeres se sienten seguras en el transporte público. Una de cada dos mujeres se siente segura caminando sola por la noche.
La inseguridad de las mujeres en el transporte público es un punto crítico (acoso sexual). El BID presentó el informe “Género y Transporte: San Salvador” en 2021, en el que constató que cerca de 700.000 mujeres utilizaban los buses como principal medio de transporte en el AMSS y que una de cada dos mujeres había sido víctima de violencia (física o verbal) en transporte público. Asimismo, se resaltó que el hacinamiento en las paradas de buses era un riesgo para ellos.
Reflexión: es positivo contar con informes técnicos sobre desigualdad de género a nivel nacional y local, ya que esto permite armonizar políticas, normas y acciones entre el gobierno central y municipal. La naturaleza y magnitud de los problemas socioeconómicos del AMSS son muy diferentes a los del resto del país. Por ello, sería conveniente realizar este tipo de estudio en los doce departamentos que expulsan población y cuyo índice de desarrollo humano es inferior al promedio nacional.